La Linterna, ubicada en el barrio San Antonio de Cali, es la última imprenta que queda a nivel nacional con máquinas de un pliego, pues la tipografía prácticamente ha desaparecido.
Sus máquinas, una de Nueva York de 1890 y otra de Francia de 1870, tienen una historia extraordinaria, pues fue en esta clase de artefactos donde se iniciaron las artes gráficas en todo el mundo.
Las aparatos que se encuentran en La Linterna se utilizan para imprimir los tipos móviles y hoy han adoptado también el linograbado, donde por medio de placas dan vida a hermosos diseños que adornan las casas de miles de personas a nivel mundial, sobre todo porque a este lugar llegan turistas y locales en busca de un afiche para coleccionar.
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“Hoy en día las maquinas son digitales. Las que tenemos aquí provienen de un diario llamado El Relator, donde un periodista de nombre Simón Henao, hacia una revista que se llamaba La Linterna.

A él le dieron como parte de pago por su liquidación dichas máquinas y así fue como fundo la imprenta con el mismo nombre”, contó Olmedo Franco Romero, socio y prensista de Linterna.
Después de 1950 la imprenta empezó a realizar el cartel mural callejero, es decir aquella publicidad que era pegada en las calles anunciando los diferentes espectáculos que había en la ciudad.
En manos de sus trabajadores
El trabajo iba y venía, pero en el 2016 las nuevas leyes ambientales adoptadas por el Gobierno, prohibió la contaminación visual y entre eso el cartel callejero se vino abajo, pues ya no se podía pegar un cartel más en toda Colombia.
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En ese mismo año Bogotá era el 90% de producción de La Linterna debido a la cantidad de artistas y eventos que allí se hacían.
“Como no dejaron pegar más afiches, el negocio se vino abajo. Fueron dos años muy duros porque, aunque llegaron a existir 17 personas trabajando en Cali, a la mayoría los liquidaron, pero quedamos tres, los más antiguos: Jaime García, Héctor Otalvaro y Olmedo Franco. Como la indemnización era tan grande, pues no tenían plata para pagarnos, decidimos tomar cartas en el asunto”, contó.
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