A Jonifer lo mataron delante de su mujer


A JONIFER LO MATARON DELANTE DE SU MUJER

Como Jonifer Garcés Ramos, de 30 años, fue identificado el hombre asesinado en la invasión Las Palmas, ubicada en el barrio Comuneros, al oriente de la ciudad.

De acuerdo con sus familiares, el hecho de sangre se presentó a las 10:00 a.m. cuando Jonifer se encontraba en compañía de su pareja sentimental.

“Nosotros estábamos en una de las cuadras de la invasión hablando con un señor que nos ayudaría con una carreta, pues acabábamos de empeñar la moto para montar una revueltería en Comuneros. Llegaron dos tipos pidiéndonos las cosas y yo les dije que me revisaran pues yo no tenía la plata que nos habían dado por la moto; cuando lo empezaron a requisar a él le encontraron la billetera con sus papeles y el 1’500.000 con el que montaríamos el negocio. Aunque le quitaron todo, uno de los tipos le puso un arma de esas que hacen con tubos de la cama en la cabeza, y yo le decía que por favor no le hiciera nada. Además le dije que nosotros no éramos de problemas. Por más que le rogué este no me hizo caso y halo el arma pegándole un disparo en la cabeza”, contó la pareja del hoy occiso.

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Jonifer no dejó de ver ni un instante a su pareja y murió a su lado, mientras ella quedó en shock y destrozada.

“Yo lo cogí y vi que le quedó un hueco grande en su cabeza. Él perdió la vida justo en ese momento porque no dio tiempo ni de levantarlo; cuando yo reaccioné salí corriendo a avisarle a una prima de él que nos había dado posada en este sector”, recordó su allegada.

Jonifer Garcés Ramos tenía 30 años,

Era de Buenaventura

Q’hubo pudo conocer que Jonifer era de Buenaventura, y había llegado al sector con su pareja hace aproximadamente seis meses.

“En ‘Tura’ él me había montado mi negocio de comidas rápidas, allá vendíamos perros, hamburguesas y salchipapas, pero debido a que empezaron a extorsionarnos nos vinimos acá, con la idea de montar otro negocio, pero la violencia arrebató esos sueños”, manifestó su pareja.

Añadiendo que el hoy occiso trabajaba en una revueltería por ratos, además de organizar y repellar los lotes del sector.

“Lo recordaré como una gran persona y un gran hombre, era una persona super atenta conmigo. Nadie me había tratado tan bien como lo hizo él. En sus últimos días él como que presentía que se moriría, pues a una prima le dijo que era la última vez que la molestaría”.

Sus familiares le piden a las autoridades investigar el hecho, para así dar con el paradero de los responsables.

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