Debido al teletrabajo o trabajo en casa por la pandemia del covid-19, al parecer ha disminuido la compra de brasieres.
Desde hace un tiempo, las 'millennials' alzaron su voz para dejar de usar brasieres bajo el movimiento #Nobra, que se hizo muy popular en redes sociales.
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Ahora, al parecer la tendencia está cogiendo mucha más fuerza debido al teletrabajo que se instaló por la pandemia del coronavirus, que obliga a pasar mucho más tiempo en casa.
La existencia del brasier o sujetador se remontan al antiguo imperio romano. La prenda era conocida bajo el nombre 'strophium', una pieza que usaba como instrumento de diferenciación entre las mujeres civilizadas-las únicas que lo portaban- y las bárbaras.
Con el tiempo, los brasieres se convirtieron en una prenda oficial y obligatoria en la mujer. No obstante, en los años 60, la utilización de esta pieza comenzó a ser cuestionada a través de diversas manifestaciones feministas.
Por esa razón, fabricantes en el mundo comenzaron a comercializar nuevos diseños para crear una apariencia más suave y natural.
Actualmente, muchas mujer se cuestionan la supervivencia de esta prenda, pues consideran que es incómoda y perjudicial para la salud.
"Cada vez que volvía a casa y me desabrochaba el sujetador era como liberarme de una cárcel, por lo que lo dejé de usar", expresó Dayna Kathan, actriz estadounidense.
Por el teletrabajo, El Confidencial María, una diseñadora española, expresó a través de su blog que concuerda con miles mujeres que han decidido dejar de lado el brasier.
"Paso muchas horas trabajando y así estoy más cómoda. Pero no solo lo hago por estar más a gusto, también siento que me queda mejor la ropa cuando no llevo sujetador", afirmó.
¿Usted cree la industria de los brasieres llegará a su fin?
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