La Policía capturó a los supuestos responsables del ataque al patrullero Ángel Gabriel Padilla, en el municipio de Yumbo.
Se trata de alias “Dieguito”, “Negro James” y “Sebas", quienes le propinaron 27 puñaladas al patrullero intentando acabar con su vida.
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A través de labores de vecindario, interceptaciones, análisis morfológicos, entrevistas, reconocimientos fotográficos y reconstrucción de los hechos a través de cámaras de video vigilancia, lograron la captura de los sujetos.
Los implicados fueron capturados en Cali, Yumbo y el municipio de Tumaco, departamento de Nariño
donde intentaban ocultarse.
El ente acusador los juzgó por lesiones personales, homicidio en grado de tentativa en concurso
heterogéneo con hurto calificado y agravado en concurso heterogéneo con daño en bien ajeno.
Pese a las 27 heridas que tenía, el policía logró recuperarse. "Este hecho se registró el 29 de abril cuando el uniformado se dirigía a recibir turno en la estación de Policía Yumbo y fue interceptado por estas personas que harían parte de la autodenominada “primera línea” que a esa hora bloqueaba la vía en el barrio Juan Pablo II, donde también se registraron hechos de vandalismo y ataques contra la ciudadanía y la Fuerza Pública", indicó la Policía.
Así pasó
En entrevista con Semana el patrullero relató que iba vestido de civil por lo que sus atacantes quienes descubrieron el uniforme, lo denominaron un infiltrado. Ante eso intentó huir mientras sujetos lo agredían en repetidas ocasiones.
“Las personas gritaban ‘ese es de la Sijín, ese es de la Sijín’, y se me vino toda la gente encima”, dijo Padilla a Semana.
Tras recibir 27 puñaladas, el uniformado fue trasladado a un centro asistencial, sin embargo, las probabilidades de vida eran muy pocas.
Su esposa entre llanto aseguró que le mostraron una foto donde "se veía de una forma increíble" que la hacía pensar que no era él.
Pese a esto, la fe de la mujer quien oraba mientras su esposo estaba intubado, logró que mostrara signos de mejoría.
Una de las puñaladas estuvo a punto de perforarle la vena aorta, además la víctima perdió la audición por el oído derecho.
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